Hay muchos casos donde se presentan los pacientes con fracturas en sus piezas dentales. Esto se puede deber a múltiples razones y lo más importante es poder detener el ciclo restaurador y poder ofrecer un tratamiento que se mantenga estable a largo plazo.
Hay mucha información, artículos e investigaciones que respaldan el tratamiento con incrustaciones. Esto nos permite conservar más estructura dental y el tratamiento resultante es menos invasivo.
Hay piezas dentales con amalgamas muy extensas, que ya han comprometido la pieza dental, en estos casos se puede pensar en una incrustación. También, podemos pensar en incrustaciones después de tratamientos de nervio. Las coronas son necesarias en casos muy específicos, donde los remanentes de la estructura dental son mínimos.
Las incrustaciones tienen distintos nombres y esto va a depender del tipo de preparación que necesitamos, después de evaluar las paredes y la calidad de tejido dental que queda, una vez que removemos restauraciones desajustadas y caries. Las onlay son las que cubren algunas cúspides de la pieza dental (las cúspides son las partes prominentes, puntiagudas que sentimos en las muelas), las overlay son las que cubren todas las cúspides y las inlay son las que no cubren ninguna cúspide.
A continuación les presento 3 casos que he llevado en la clínica, donde hemos podido realizar incrustaciones y conservar mayor cantidad de estructura dental.
CASO 1
En este caso realizamos una incrustación que llamamos overlay (recubrimiento cuspídeo completo), donde al realizarse el tratamiento de nervio y evaluando el espesor de las paredes remanentes, lo ideal es que todas las cúspides tengan protección y evitar una fractura de la pieza dental.
CASO 2
En este caso nuevamente decidimos realizar una overlay, ya que había exposición pulpar después de la fractura inicial y esto debilita la pieza dental. Decidimos que era mejor darle protección a ambas cúspides de la premolar.
CASO 3
No siempre es necesario el tratamiento de nervio, en este caso, el paciente tenía una reconstrucción muy grande en resina (imagen izquierda) que no era la ideal. No había sintomatología y una vez que se removió toda la resina, no hubo exposición del nervio, por lo que se continuó con la preparación y se realizó un overlay. Se utiliza un material llamado disilicato de litio, que ha mostrado tener excelentes resultados ante las fuerzas masticatorias.
Conclusiones
Hay pérdidas de estructura importante en las piezas dentales, donde es mejor optar por un tratamiento como las incrustaciones.
No siempre después de un tratamiento de nervio, debería de ir una corona.
Siempre las citas de control son importantes con su odontólogo para evitar complicaciones mayores a futuro.
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